FORMACION Y CAPACITACION VIRTUAL EN ATENCIÓN Y APOYO A LA FAMILIA DE NUESTROS PACIENTES
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La familia es una de las partes involucradas cuando hay una persona con un problema de conducta adictiva. Su presencia cercana y constante los convierte en testigos directos y al mismo tiempo actores principales dentro de la red de relaciones que se generan dentro de la convivencia con una persona adicta.
Por lo general, el entorno cercano de la persona con adicción desarrolla actitudes y comportamientos, activos o pasivos, conscientes o inconscientes.
Apoyos fundamentales para la superación de una adicción
Estos pueden perpetuar el estado motivacional precontemplativo y contemplativo del paciente con una adicción y retrasar la búsqueda de ayuda real y efectiva de esta última.
En los problemas de adicción, es común que aparezca toda una constelación de en la familia que conductas disfuncionales deterioran gravemente la relación y los afectos con el familiar enfermo.
Estos comportamientos suelen ser frecuentes discusiones, mentiras y engaños por parte del usuario, desconfianza, reproches, agresiones, robos, culpa, indefensión, miedos …
La espiral de lesiones y daños va en aumento, y ningún miembro de la familia lo logra. permanecer al margen. En mayor o menor medida, se establece una espiral de autodestrucción del entorno familiar y las relaciones entre los diferentes componentes del núcleo más íntimo y cercano de personas.
Como resultado, el amor y el cariño dan paso a una situación marcada por una actitud policial de obsesiva vigilancia, interrogatorios y enfrentamientos que generan un conflicto en convivencia con difícil solución.
Por si fuera poco, los diversos intentos de ayuda que se han llevado a cabo han puesto al límite la situación de la familia, sobre todo cuando no dan el resultado esperado y la persona con problemas de adicción recae nuevamente, colapsando las expectativas del entorno. cerca del paciente con adicción.
Por eso el papel de la familia es fundamental en la recuperación de la persona con adicción.
Para ello, en un inicio, es importante en la mayoría de los casos que la familia esté en un segundo plano, cuide su estado emocional y acepte un tratamiento profesional conjunto a través de un enfoque familiar o sistémico.
Esto con el objetivo de corregir conductas disfuncionales, conductas de codependencia, favorecer el perdón y crear un clima de comprensión de que el alcoholismo o la adicción es una enfermedad que debe ser tratada.
Solo curando las heridas, consolidando el compromiso con el bien común y abriendo paso en el proceso de recuperación acompañados de profesionales, se pueden sentar las bases para recuperar las relaciones afectivas perdidas.
Además de poder mejorar las relaciones afectivas existentes, basadas en una progresiva confianza de la familia hacia su familiar enfermo.
A continuación profundizaremos en ciertos aspectos esenciales a considerar en cuanto a las conductas adictivas y de qué manera la familia puede servir como soporte fundamental para superar una adicción.
Características de un individuo con conductas adictivas
Para comprender las conductas adictivas, es fundamental caracterizar al individuo que las exhibe y así reconocer cómo es posible brindar el apoyo necesario para superar la adicción.
Un individuo con conductas adictivas tiende a presentar ciertas características que lo hacen continuar con un círculo vicioso de adicción y que los familiares deben conocer y reconocer, entre ellas:
Tolerancia
Un individuo con conductas adictivas tiende a volverse tolerante con dicha conducta, esto significa que la intensidad de la adicción se hace cada vez más grande.
Es decir, las necesidades del adicto aumentan con el tiempo debido a la necesidad constante de satisfacer necesidades adictivas hasta que finalmente se vuelve dependiente de ella.
Dependencia
Cuando el individuo con conductas adictivas ha alcanzado la dependencia, esto significa que este individuo incluso fisiológicamente necesita realizar sus conductas adictivas para sentir satisfacción y así garantizar su bienestar. Esto se conoce como ansia o ansiedad por consumir.
Podemos tomar como ejemplo, un sujeto adicto al alcohol que con el tiempo tiene la capacidad y necesidad constante de tomar más bebidas alcohólicas.
Abstinencia
El síndrome de abstinencia es un factor o condición fisiológica que produce en el adicto una sintomatología característica muy marcada que lo enferma.
Esto es producto del incumplimiento de dicho comportamiento adictivo. Es decir, el individuo no se involucra en conductas adictivas y así, según el grado de adicción, se presenta en el organismo el síndrome de abstinencia y privación que provoca la aparición de síntomas de grave intensidad que requieren un tratamiento específico.
Consumir a pesar de las consecuencias negativas La
La adicción por parte del adicto es una conducta que incluso ellos reconocen que está mal y que aunque han intentado dejar de fumar, superar la conducta adictiva cuando hay dependencia no es algo realmente muy sencillo.
Muchas veces, un adicto reconoce que está abusando de su adicción al igual que ignora la intensidad de la misma.
En ambos casos, la presentación continuada de conductas adictivas suele deberse a la necesidad constante de sentir bienestar.
Signos y síntomas de las personas con conductas adictivas Los
Los familiares de las personas con conductas adictivas deben conocer y reconocer no solo las características de las conductas adictivas sino también las señales y síntomas que dichas conductas provocan en el adicto.
Signos de un individuo con conductas adictivas
- Pérdida de percepción del tiempo.
- Pérdida de interés en actividades diarias importantes.
- Falta de sueño
- Frustración.
- Ansiedad.
- Mentiras.
- Pensamientos obsesivos
- Depresión.
- Culpa.
Síntomas de un individuo con conductas adictivas
- Irritabilidad.
- Depresión.
- Inquietud.
- Calambres
- Mareos
- Taquicardia.
- Insomnio.
Proceso de recuperación de adicciones La recuperación de adicciones
Es un proceso largo que consta de varios pasos que requieren una gran disciplina y dedicación en el proceso en el que el entorno familiar está íntimamente involucrado.
Es por ello que la familia juega un papel fundamental en la superación de una adicción porque está ligada a todo el proceso evolutivo del adicto y su adicción en cuestión.
De esta forma, es necesario que el familiar conozca todo el proceso de recuperación de una adicción para poder mejorar y contribuir en este proceso de manera positiva.
¿Cómo ocurre la recuperación?
Esta recuperación consiste en la decisión de más o menos de no realizar la conducta adictiva, luego la superación del síndrome de abstinencia y finalmente un cambio en cuanto a estilo de vida.
El apoyo familiar es necesario durante todo el proceso, sin embargo, el primer paso en la recuperación es puramente personal. La familia cumple su función o sirve de pilar del proceso de superación del síndrome de abstinencia.
Durante el síndrome de abstinencia, el adicto tiende a evolucionar en un sentido complejo, comenzando a presentar un cuadro clínico caracterizado por signos y síntomas específicos que ponen en juego el proceso de recuperación.
En este punto, el familiar que apoya al adicto debe estar atento a las posibles recaídas, especialmente cuando el adicto se involucra en conductas engañosas y mentirosas para ocultar su recaída.
¿Cómo ayudar en el proceso de recuperación?
- Desarrollar técnicas de comunicación.
- Evite dejar objetos o cosas que causen adicción o induzcan un comportamiento adictivo a la vista.
- Desarrolle una red de apoyo para el adicto.
- Evite las personas y los entornos que pueden contribuir a comportamientos adictivos.
- Planifique actividades recreativas para mantener ocupado al adicto.
- Acompañar en cada proceso de superación de la adicción.
- Tener una posición comprensiva pero autoritaria.
- Evite los sentimientos de culpa y rechazo.
Estos aspectos antes mencionados marcan la diferencia entre una adecuada recuperación de una adicción a una fuerte recaída por parte del adicto.
También es fundamental que el familiar que apoya al adicto sea capaz de mantener una actitud positiva y constante.
Por otro lado, una vez que el adicto ha aceptado la adicción y decide iniciar el proceso de recuperación, el familiar solidario puede involucrarse y motivar al adicto a asistir a sesiones psicológicas que mejoren el proceso de recuperación.
Y no solo el adicto debe acudir a las sesiones psicológicas, los familiares también deben poder asistir a estas sesiones con el fin de mantener la salud mental y una mejor posición en la situación y durante todo el proceso de recuperación de la adicción.